Es cierto que la mayoría de los fotógrafos destacan o se especializan en una materia y únicamente trabajan en su especialidad. Y aunque esta afirmación no deja de ser cierta, también es cierto que dependes de tus clientes y sus encargos para sobrevivir. Por lo tanto, a veces tienes que elegir entre hacer lo que te gusta y/o lo que tus clientes te demandan.
Sin embargo, yo elegí la posibilidad de realizar un tipo de fotografía que realmente me apasione, con independencia de la disciplina a tratar, y es que siendo sinceros, me apasiona trabajar en la fotografía de personas...
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Por lo tanto, desde los últimos seis años, siempre he priorizado siempre el trato personal y el trabajo de calidad en cada fotografía. El trato exclusivo a cada cliente como si fuera el único, es una de nuestras metas en el día a día de cada trabajo.
También, como no podría ser de otra forma, está presente una búsqueda continua de la creatividad, para intentar en la medida de lo posible mostrar las cosas como yo las veo, o cómo a mí me gusta llamarlo, mi #OtraMirada.